Es la disciplina de la educación que por tradición se ha hecho cargo de la población escolar con discapacidad o dificultades más severas de aprendizaje.
 

En sus inicios estuvo vinculada con la ciencia de la medicina y de la psicología.
 

Durante la primera mitad del siglo XX promovió la necesidad de detectar y clasificar de forma precisa el trastorno presente en cada individuo y el desarrollo de una atención educativa especializada distinta y separada de la organización educativa común. 
 

La evolución de la educación especial se ha caracterizado por ir abandonando el enfoque médico o rehabilitador, para ubicarse más bien en un marco predominantemente educativo, que no solo permite mejorar las condiciones del proceso de enseñanza-aprendizaje de la población que presenta necesidades educativas especiales, sino la diversidad de estudiantes que forman parte del sistema escolar.